Cuenta la leyenda, que en una tribu africana, cuando una mujer se entera que está esperando un hijo/a, corre a contárselo a las otras mujeres. Ellas creen que cada persona tiene una canción muy suya, la Canción de la Vida.
Por eso, unos días más tarde, al amanecer, se adentran en la selva para descubrir, juntas, la canción de la nueva criatura.
Cada cual, tiene una canción, un nombre, una vibración especial que lo hace único.
Para componer nuestra canción, hemos empezado desde el exterior, utilizando los lápices de Ubuntuland que abarcan todos las tonalidades de la piel.
Después, hemos buceado hasta las cualidades de cada uno/a de nosotros/as.
UBUNTU! «Yo soy porque nosotros/as somos»